Tony Janzen Valverde Victoriano, alias “Pequeño J”, fue trasladado este viernes a un penal de máxima seguridad en la ciudad peruana de Cañete, donde permanecerá detenido bajo prisión preventiva mientras se define su extradición a la Argentina. La Justicia bonaerense lo investiga como presunto autor intelectual del triple femicidio de Lara Gutiérrez (15), Brenda del Castillo (20) y Morena Verdi (20), ocurrido en el partido de Florencio Varela.

El joven de 20 años fue arrestado días atrás en la localidad de Pucusana, al sur de Lima, y quedó a disposición del juez Cristhian Rafael Chumpitaz, quien ordenó la medida de detención preventiva por riesgo de fuga.
En las últimas horas, el Servicio Penitenciario Nacional del Perú difundió las primeras imágenes oficiales del ingreso de Valverde Victoriano a la cárcel, se lo ve firmando documentación, dejando sus huellas digitales y siendo escoltado por personal penitenciario hasta su celda.

Junto con el traslado, se le realizaron pericias psicológicas que arrojaron un perfil considerado preocupante. El informe describe a Valverde Victoriano con:
- Rasgos antisociales y psicopáticos, con escasa empatía hacia las víctimas.
- Tendencias narcisistas, con necesidad de ejercer poder y control.
- Agresividad crónica, asociada a un entorno violento desde edad temprana.
- Capacidad de manipulación, clave para escalar dentro de una red narco sin exponerse directamente.
Los peritos señalan que esta combinación de factores explica su rol como presunto instigador del crimen, a pesar de no haber participado directamente en los asesinatos.

Según la investigación judicial en Argentina, “Pequeño J” lideraba una red narco transnacional con base en la Villa 1-11-14 y ramificaciones en el sur del conurbano bonaerense. Los fiscales creen que delegaba las acciones más violentas para mantenerse fuera del radar judicial, lo que explicaría la ausencia de antecedentes penales.
Durante la audiencia inicial en Lima, Valverde Victoriano rechazó la extradición y aseguró ser inocente. Su abogado, designado por el Estado peruano, argumentó que en la Argentina “no hay una investigación clara” y que buscan encarcelarlo sin pruebas suficientes.
La estrategia de la defensa apunta a dilatar el proceso de extradición, mientras la Justicia argentina continúa reuniendo pruebas para sostener el pedido formal ante las autoridades peruanas.
Fuente: Medios

