Una serie de robos mantiene en alerta a los vecinos y comerciantes de la calle Santa María, en Neuquén. En dos días, al menos dos locales fueron violentamente atacados durante la madrugada, mientras que otros hechos ocurrieron en pleno día, generando temor e incertidumbre en la comunidad.
Los delincuentes, que se movilizaban en dos motos, rompieron vidrieras y destrozaron locales. Vanina, vecina de la zona, relató: “Fue tremendo. Tenemos las cámaras que captaron todo y rompieron todo. Fueron dos noches seguidas”. Los ataques afectaron un kiosco y un local de ropa, este último con vidriera blindada que los ladrones intentaron romper incluso con un hacha.
Las cámaras de seguridad lograron registrar parte del accionar de los sospechosos, aunque no permiten identificarlos, ya que circulan con cascos que cubren sus rostros. Según los vecinos, se trata de adultos que actúan de manera fría y metódica.
La modalidad delictiva también se extiende a plena luz del día. Vanina contó que días atrás, mientras vecinos estaban trabajando, robaron las ruedas de la bicicleta de la esposa de un habitante de la zona. “No podemos vivir tranquilos. Ya ni de día ni de noche tenemos seguridad. Es tierra de nadie”, expresó.
Ante la situación, los habitantes han reforzado medidas de seguridad: colocaron cámaras, luces y alambres de púa, aunque los robos persisten. La comunidad evalúa organizarse para visibilizar los hechos y exigir más presencia policial, reclamando acciones urgentes para prevenir nuevos ataques.
“Queremos más presencia policial. No puede ser que dos noches seguidas hayan entrado, rompieran todo y nadie los detuviera. No queremos esperar a que pase una tragedia”, advirtieron los vecinos.
Fuente: Medios.
