El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, envió finalmente este jueves al Senado el proyecto de reforma a la ley de Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU), que ya había sido aprobado en ambas cámaras pero debía volver a la Cámara alta por modificaciones introducidas en Diputados.
La demora en el trámite legislativo generó fuertes críticas de la oposición, que acusó a Menem de haber retrasado intencionalmente el envío del proyecto para evitar un debate incómodo para el oficialismo en la antesala de las elecciones legislativas del 26 de octubre. No obstante, el oficialismo habría logrado su objetivo: el texto recién se trataría en comisión la próxima semana, lo que vuelve improbable que llegue al recinto antes de los comicios.

El proyecto, impulsado originalmente en el Senado con un amplio consenso político, modifica la ley 26.122 de 2006, impulsada durante el gobierno de Néstor Kirchner. Uno de los cambios centrales es que, a partir de esta reforma, ambas cámaras deberán pronunciarse sobre la validez de los decretos, en lugar de una sola, como establece la ley actual.
Además, incluía un artículo, finalmente rechazado, que establecía que el Congreso tendría 90 días corridos para tratar los DNU, plazo tras el cual perderían validez si no se debatían. Esa cláusula fue descartada por Diputados y es uno de los puntos en disputa que ahora deberá resolver el Senado.
El proyecto fue girado a la Comisión de Asuntos Institucionales, presidida por la senadora Alejandra Vigo (Provincias Unidas), una de las impulsoras de la reforma. Desde allí deberá emitirse un dictamen para que el texto pueda llegar al recinto. Pero, sin dictamen, la única vía para tratarlo sería mediante una mayoría especial de dos tercios, algo difícil de conseguir en la recta final de la campaña.

Desde el oficialismo, se justificó la demora señalando que no existe un plazo legal estricto para enviar el texto al Senado y que, además, el viernes pasado fue feriado, lo que afectó la actividad legislativa. También se argumentó que en la misma sesión se habían aprobado interpelaciones a funcionarios del Ejecutivo que debían organizarse antes.
Sin embargo, desde la oposición no tardaron en denunciar una maniobra dilatoria. El diputado Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica) presentó una nota formal exigiendo la “inmediata comunicación” del proyecto al Senado y criticó públicamente a Menem en redes sociales:
🚨 7 DÍAS SIN DESPACHAR LAS LEYES APROBADAS POR DIPUTADOS
— maxi ferraro 🎗️ (@maxiferraro) October 16, 2025
Siendo las 12:00 hs, y siete días después de la sesión del 8 de octubre, los proyectos de ley aprobados por Diputados siguen cajoneados en la Presidencia.
Entre ellos, la reforma que limita los DNU y la delegación… pic.twitter.com/pUChVWfB9W
El oficialismo, en tanto, evitó dar declaraciones confrontativas, pero con el giro del proyecto en las últimas horas, parece haber buscado aplacar la presión sin ceder terreno político en una semana clave antes de la votación.
Fuente: Medios







